Estamos en Marzo, sí, ya llevamos el primer trimestre del 2009, y se acerca la "semana mayor". Como es normal, en estos días estamos soportando un sol tremendo e inclemente, tan fuerte que al mediodía dan ganas de meterse debajo de las piedras. Pero, extrañamente, me siento como en Diciembre, porque el calor del día desaparece por las noches.
Por las noches se ha sentido un rico "fresco" que te deja estar sin abanico hasta que los zancudos empiezan a bombardear, y de madrugada tenés que recurrir a la cobija y a la milenaria técnica del empiernado para buscar calor. Y como se va el agua, la que guardamos por las noches al día siguiente amanece tan helada que me despierto con la primera panada y salgo lo más rápido posible de la ducha y tiritando (creo que por eso últimamente no me he bañado muy bien). Ahorita estamos a 26 grados centígrados, lo que equivale a una fría noche navideña, como si estuviera en matagalpa.
Gran culpa de estos fríos la tiene el viento, tan fuerte ultimamente que se ha llevado algunos techos, sobre todo en los departamentos. Aunque aún no ha llovido, al menos, porque el cielo se mantiene limpio de nubes, aumentando el efecto abrasante del sol.
A ver cómo sigue la cosa...
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